¿Quién dijo que la comida vegana era monótona?

Para aquellos que han adoptado este estilo de vida, existen novedosas preparaciones para ayudar a cubrir sus requerimientos nutricionales. Este sábado 12 de julio se realizará un taller de cocina vegana a cargo de la empresa Árbol de la Vida, la cual busca compartir conocimientos en la búsqueda de una mejor calidad de vida, trabajando integralmente cuerpo, mente y espíritu. Por ello, se ha creado este taller, el cual tiene como objetivo enseñar platos ideales para la transición de aquellos que recién comienzan a abordar el veganismo. Se iniciará con una clase de yoga y luego se procederá a preparar platos como falafel, tallarines con pesto, tapas con verduras y palta, mousse de chía, brownies y más. Aquellos interesados pueden inscribirse llamando al 445-0788 o en Raw Café, el costo es de 150 soles. La cita es a las 9 am en Mariano Odicio 432, Miraflores.

Manzana 1: Baja de peso tomando cerveza

Hace poco, leí  una noticia en un conocido diario limeño que aseguraba el poder de la cerveza en la pérdida de peso bajo el título “La cerveza puede hacerte adelgazar, según estudio”. Me pareció una noticia sumamente curiosa y errada en primera instancia, la cual dejé pasar hasta que hace un par de días escuché por radio la siguiente frase: “Se ha comprobado que la cerveza hace bajar de peso”. A raíz de ello, me dediqué a investigar un poco más sobre el tema para aclarar esta “manzana” que podría crear confusión.

¿Tomar cerveza te ayuda a bajar de peso?

Empezaré destacando algunos puntos clave:

1. El poder de los medios para tergiversar lo que dicen los estudios científicos. El ciclo de las noticias científicas empieza cuando algún resultado de un estudio es “traducido” por la prensa, entonces en el estudio tenemos: “Las personas con características A, frecuentemente realizaban actividades tipo B” lo cual, los medio traducen como: “Se ha comprobado que realizar B hace que seas A”. Ello, al ser presentado a los lectores, ocasiona una serie de comentarios de tipo “¿Sabías que B hace que seas A? ¡Está comprobado!”, e incluso llega a ti a modo de curiosidad alimentaria con una frase de tipo “¿Es verdad que B hace que las personas sean A? Lo leí en el periódico, está comprobado”. Esto, queridos lectores, es lo que ha pasado en el caso de la cerveza (si tienen la amabilidad de reemplazar A por “menor peso” y B por “beber un vaso de cerveza al día”, entenderán un poco mejor de lo que hablo).

2. Una vez que hemos identificado el ciclo de las noticias científicas, es más fácil “desenmascarar” esta noticia viral. En el estudio real se presenta que la relación entre la talla y el peso (IMC) era menor en las personas que bebían un vaso de cerveza al día y que la mayoría de estas personas tenían una menor circunferencia de cintura. OJO, estamos viendo las características de la población, en ningún momento se afirma algún tipo de asociación. Si vamos un poco más allá, vemos que las personas dentro de este grupo son las de menor edad, lo cual sería un factor importante al momento de medir la grasa abdominal, pues la grasa corporal sufre una redistribución en adultos mayores.  Y para poner la cereza al helado, las personas en este estudio han tenido un plan dietético especial y que tiene como base la dieta mediterránea (dieta con abundancia de alimentos vegetales, como pan, pasta, arroz, verduras, hortalizas, legumbres, frutas y frutos secos; el empleo de aceite de oliva como fuente principal de grasa; un consumo moderado de pescado, marisco, aves de corral, productos lácteos (yogur, quesos) y huevos; el consumo de pequeñas cantidades de carnes rojas). ¿Empiezas a ver el titular más lejano y menos certero? Vamos bien.

3. Analicemos, también, de dónde viene este estudio: Centro de Información Cerveza y Salud, esta institución ha realizado varias investigaciones donde curiosamente #SiClaro la cerveza siempre sale bien parada. Es más, según este centro, el consumo de cerveza podría resultar positivo en el embarazo, la práctica deportiva, el estado inmunológico, la enfermedad cardiovascular y de forma negativa con, aparentemente, nada. Lo cual, hace pensar que más que informar sobre los aspectos buenos o malos que puedan hallarse, redunda en lo mucho que podría ayudar el consumo de cerveza en la salud polarizando los “informes” y “noticias”. ¿Aún crees que la cerveza podría, como cuenta este diario, ayudar a bajar de peso?

4. Para terminar, analicemos lo que dicen organismos sin conflicto de intereses. La Organización Mundial de la Salud (OMS), afirma “Se ha identificado el consumo de alcohol como cancerígeno en los siguientes tipos de cáncer: oral, nasofaringe, faringe, orofaringe, laringe, esófago, colon, recto, hígado y mama en mujeres. Además, es probable que cause cáncer de páncreas. A mayor consumo, más aumenta el riesgo de todos estos tipos de cáncer, teniendo en cuenta que incluso un consumo tan bajo como el de una bebida o menos al día implica el aumento significativo de algunos tipos de cáncer”. Además, en la revista Annals of Oncology, un estudio con sólida evidencia científica titulado: “Light alcohol drinking and cancer: a meta-analysis” (Consumo de alcohol en pequeñas cantidades y cáncer: Meta-análisis) concluye, luego de haber analizado en 222 estudios que abarcan una población de más de 92.000 sujetos denominados “light drinkers”, que el consumo de alcohol, aunque sea en pequeñas cantidades, aumenta el riesgo de padecer  cáncer de la cavidad oral, faringe, esófago y mama.

Tal vez, sea hora de mirar con un punto de vista más crítico lo que presenta la prensa o escuchamos en otros medios ampliamente difundidos. No te engañes, beber cerveza no te hará bajar de peso; lo cual, sí podrías lograr con alimentación balanceada y actividad física.

Tendencias y alimentación: ¿Cómo eliges?

¿»Una vez al año no hace daño»? ¿»Es solo una vez a las quinientas»? ¿»Es sano porque no tiene grasa»? Se realizó una breve encuesta a varios limeños sobre su consumo y es posible ver que muchos no se preocupan de las características de los alimentos que consumen. Muchas veces elegimos por conveniencia (lugar cercano, economía, etc) o ¿será por tendencia?

Y tú… ¿Cómo eliges?

“Los jóvenes, en realidad, buscan cantidad y no calidad”

Alicia Ramírez, nutricionista del PPA y colegio Alpamayo

Alicia Ramírez, reconocida nutricionista, desempeña su labor en el Puericultoro Pérez Araníbar, Colegio Alpamayo y como docente. Consciente de los cambios en el comportamiento de los jóvenes, ha analizado el origen de algunas tendencias alimentarias, propias del acelerado ritmo de vida que se impone ante nosotros. En esta entrevista nos habla de cómo adaptar nuestra alimentación al estilo de vida que llevamos.

¿A raíz de qué crees que han nacido estás tendencias?

Considero  que ha sido a raíz de la industrialización. Del comercio, que está en boga y que en realidad genera alternativas rápidas, alternativas no saludables; sin embargo, no son las más adecuadas. Debido a la rapidez con la que está al alcance de todas las personas, genera más bien un exceso tanto de azúcares como de grasas en la alimentación de cada una de las personas.

En tu experiencia, ¿has podido ver estas tendencias de cerca?

Bueno, sí. Los jóvenes, en realidad, buscan cantidad y no calidad. Y eso, es una problemática muy frecuente, que la encuentro no solo en los estratos bajos, sino también en los estratos altos y esto genera un inconveniente porque excedemos el requerimiento nutricional de las personas.

¿Qué opciones le darías a estos jóvenes?

En realidad, dentro de las opciones están los refrigerios saludables, que podemos incluirlos dentro de su programa de alimentación; pero esto debe ser guiado por un especialista. Sugerirle nosotros que puedan llevar un lunch en sus mochilas o de repente en un táper, para que puedan consumirlo cada 3 horas y de esta manera tener energía necesaria para sus actividades.

¿Esto funcionaría bien para universitarios y gente que trabaja?

Claro, esa es la idea. La tendencia es acostumbrarlos a que consuman tres alimentos principales y dos refrigerios saludables. Brindándole nosotros, creo yo, las alternativas necesarias podrían ellos entender todo este proceso y que es, en realidad, en retribución a su propia salud.

A raíz de este proceso de industrialización y la escasez de tiempo, ha nacido una contracorriente llamada “Slowcal”, que busca dar el tiempo y espacio necesario a la alimentación. ¿Crees que tenga un impacto fuerte?

Sí, me parece interesante, importante esta toma de decisión. Sobre todo, a raíz de los espacios que necesitamos las personas que normalmente estamos apurados. Personalmente, yo también tengo que almorzar rápidamente o, de repente, ni siquiera almorzar; y es así, nuestra vida es acelerada. Sin embargo, si la industria, a través de las personas que tienen a su cargo el poder, implementara esto en todas las empresas, pues podría tener un efecto positivo, debido a que la persona tendría su hora no solo para almorzar sino para poder hacer el descanso necesario.

Las tendencias, rutinas…mejor dicho nuestros cambios

Por: Cynthia Andrade, psicóloga egresada de la Universidad Peruana Cayetano Heredia.

 

Buscan anticipar tendencias: Ecológico y sostenible (Slowcal)

Los estilos de vida, podríamos decir que son nuestras herramientas para ordenarnos en lo que debemos y queremos lograr. Asimismo, también son nuestro camino para definirnos o diferenciarnos. Nuestro estilo de vida se observa desde el celular que elegimos hasta la manera de interactuar con los demás, y esto no deja de lado nuestros hábitos alimentarios.

Encontramos a la persona light, que solo se asoma a los establecimientos de comida sana y baja en calorías; o vemos al que la vida le pasa volando y tiene que pasar por todos los lugares de comida rápida. Entonces, podríamos inferir que nuestras necesidades son nuestras motivaciones para definirnos, las cuales no siempre logramos descubrir. Y psicológicamente, vamos satisfaciendo necesidades desde nuestro beneficio propio hasta la búsqueda de adaptación social.

¿Nos damos cuenta de lo que pasa? ¿Qué tanta importancia le damos a estos hábitos o tendencias? Es cierto, vamos cambiando, pero aun así todas las mañanas pasamos por nuestro “Starbucks” o por “La Gran Fruta”. Entonces, ¿quiénes se van adaptando, las empresas o nosotros? Por ello, no sorprende que las empresas busquen predecir “psicológicamente” nuestros comportamientos para alcanzar el ritmo de vida que estamos adoptando.

Here and Now

6:30 a.m.: Me levanto de prisa, dándome cuenta que otra vez mi despertador no sonó (o lo apagué entre sueños) y que voy a llegar tarde a clases. Es viernes, todos están felices menos yo. Dormí más de la cuenta y tengo que correr a ducharme y cambiarme a la velocidad de la luz poniéndome lo primero que encuentro en mis cajones. Estoy a punto de quedarme sin entrar a la clase por llegar tarde y a una tardanza de que la profesora del curso me odie irremediablemente.

7:00 a.m.: Salgo de mi habitación aún arreglándome el saco y busco algo de comer en el refrigerador. Mis prácticos yogures en botellita se han acabado. Horror. Mi estómago gime de dolor y escucho sus reclamos. Necesito algo de comer, algo ‘para llevar’, algo que pueda comer en el taxi y me permita aguantar hasta las 12 m que termina la clase. No dándome por vencida rebusco en las repisas, desordenando todo lo que esta al alcance de mis manos, terminando el desorden sin éxito. Nada. Nada para comer en el camino. Volteo desanimada hacia la mesa del comedor y ahí las veo: MI SALVACIÓN. Un par de mandarinas se asoman tímidamente bajo el mantel que cubre el frutero. Las tomo rápidamente y las meto en mi bolso.

8:00 a.m.: Miro distraída por la ventana del taxi, escuchando la música que ha puesto el conductor. De pronto, recuerdo el pequeño snack que metí en mi bolso. Saco ambas mandarinas y las como en el taxi, mientras mi estómago agradece y pienso en cambiar de despertador

Vista desde el taxi: Estudiantes apurados intentando llegar temprano a clases.

Tendencias Alimentarias: ¿Con cuál te identificas?

Nos encontramos en constante cambio, especialmente en lo que se refiere a tendencias. Entendemos por tendencia un estilo o costumbre que deja huella en un periodo temporal o en un lugar. Al hablar de tendencias alimentarias, nos referimos a los hábitos o estilos de vida que marcarán la elección y alimentación del consumidor durante los próximos años. A continuación, describiré algunas de las tendencias que están causando revuelo en nuestra localidad:

Here and Now – «Aquí y Ahora”: Es la tendencia típica de los nómadas urbanos, pues busca conveniencia, facilitar su estilo de vida, flexibilidad, optimizar el tiempo y cuidar su salud. Eso sí, busca satisfacer sus necesidades alimentarias, en cualquier momento y lugar.

Supersense –“Experiencia multisensorial”: Tendencia que muestra el cambio de la alimentación como “necesidad fisiológica” a “actividad extraordinaria dentro de lo cotidiano”. Hace referencia a productos que impactan los 5 sentidos, generando una experiencia sensorial intensa, plena y placentera, provocando sensaciones originales y diferentes.

Made Simple – “Hazlo Simple”: El consumidor actual padece una sensación de falta continua de tiempo y está siendo bombardeado de información y productos de consumido rápido, lo que genera ansiedad al momento del consumo. Ante ello apareció Made Simple,  que induce a crear soluciones flexibles para un consumo inteligente, simplificando la elección y ahorrando tiempo.

Food Telling – “Alimentos con mensaje”: Esta tendencia se basa en la búsqueda de confianza, seguridad alimentaria y consumo inteligente. Busca la incorporación de información transparente, mensajes e historias a los alimentos, conectando y acercando al consumidor, así como dando mayor identidad y autenticidad a los propios alimentos.

My Health – “Salud personalizada”: ¿Preocupado por tu salud? Esta tendencia induce una actitud proactiva y responsable hacia el cuidado de la propia salud. Ello, se refleja en la búsqueda de alimentación personalizada y adaptada a las necesidades personales, para alcanzar un equilibrio físico, mental y emocional.

Eater_tainment – “Experiencia alimentaria”: Si buscas algo nuevo, original y tienes la necesidad de escapar del día a día, esta es tu tendencia. Pues, hace referencia a la búsqueda de experiencias memorables que conecten con las necesidades emocionales de los individuos y aporten un valor añadido al producto alimentario.

Slowcal – “Vida pausada y de calidad, tiempo para uno mismo y para alimentarse”: El rápido ritmo de vida y el derroche en la sociedad moderna de consumo, han generado una contracorriente que busca una mayor conciencia y responsabilidad con el impacto del consumo alimentario en lo personal, social, económico y ambiental. A raíz de ello surge una necesidad de un consumo de calidad, equilibrio y sostenibilidad.

Ego Food – “Expresión Alimentaria”: Busca la identificación (individual o dentro de un colectivo), “personificando” los deseos, valores y/o aspiraciones en los productos alimenticios, para crear una conexión. Si buscas mostrar tu forma de ser a través de lo que consumes, esta es tu tendencia.

¿Identificad@ con alguna? Como nutricionista, recomiendo a cada persona adaptar su tendencia a la elección de productos balanceados y saludables, siempre teniendo en cuenta las porciones y la calidad alimenticia del producto a elegir. No te adaptes a la comida que encuentras a tu alrededor (que muchas veces es comida rápida), busca alimentos que se adapten a tus necesidades.

Manzana. Siete letras cargadas de significado.

A lo largo de nuestra vida, seguro hemos escuchado muchas historias, mitos y leyendas que involucran diversos alimentos; sin embargo, es una fruta la cual se lleva el Oscar al alimento con mayor simbolismo: La manzana.

Desde leyendas sobre la creación (Adán y Eva), pasando por la mitología griega (La manzana de la discordia) hasta Disney (Blancanieves), podemos encontrar a esta fruta cargada de un fuerte significado. Pero, ¿qué tienen común estas historias? En todas ellas, se toma la imagen de una manzana para confundir y despistar a los protagonistas.

¡Vaya poder de la manzana!

Actualmente, tal vez no existan desatinadas serpientes, dioses griegos o malvadas brujas que nos ofrezcan manzanas, pero existe algo mucho más fuerte. Nuestras manzanas modernas se ven reflejadas en la información alimentaria que nos bombardea a diario (tendencias, dietas, tips para mantener la salud, cómo conseguir la vida eterna con una fruta, el mejor snack del universo, etc), la cual no es del todo cierta. Como cibernautas entrenados, al llegar a nosotros alguna curiosa “media verdad” procedemos a comparar, analizar, pensar, replantear y googlear para convencernos de si es cierta o no. Es por eso, estimado lector, que nace este blog.

La manzana en mi cabeza, es un espacio para develar mitos y analizar de dónde viene y a dónde nos lleva nuestro comportamiento alimentario. No te damos todo “masticadito”, pero sí lo suficientemente digerible y basado en información científica para que puedas sacar tus propias conclusiones sin matarte buscando sobre algo 6 horas seguidas. En otras palabras: Bienvenid@, cualquier cosita, #Preguntanomás.